TIJUANA, BC, 02 DE ENERO DE 2023.- Tres estudiantes de la Escuela Normal Fronteriza Tijuana que se hicieron acreedores a la beca “Paulo Freire” de Movilidad Académica Iberoamericana, y que hicieron una estancia en instituciones educativas similares de República Dominicana y Ecuador, retornaron a esta frontera en los últimos días del año que recién concluyó, informó la directora de la ENFT, doctora Catalina Guadalupe Ortiz Macías.
Se trata de los alumnos, Dulce Belén Solís Rivera, del séptimo semestre de la Licenciatura en Enseñanza y Aprendizaje de Inglés en Secundaria, y Marco Antonio Cibrián Miramontes, del quinto semestre de la Licenciatura en Enseñanza y Aprendizaje de Matemáticas en Secundaria, quienes estuvieron en la Universidad Nacional de Educación (UNAE), de Azogues, ciudad capital de la provincia de Cañar, Ecuador.
Asimismo, Sussy Lizeth Gómez Curiel, del quinto semestre de la Licenciatura en Educación Preescolar, quien hizo su estancia en el Instituto de Formación Docente “Salomé Ureña” (ISFODOSU), recinto Emilio Prud’ Homme (EPH), en la ciudad de Santiago de los Caballeros, República Dominicana.
La doctora Ortiz Macías, explicó que los tres alumnos de la ENFT fueron parte de un grupo de 9 normalistas del país que participaron en la convocatoria “Jaime Torres Bodet – Paulo Freire 2022” y que obtuvieron la beca, en un evento que viene realizándose anualmente desde el 2016, año desde el cual a la fecha han participado 225 estudiantes de los 32 estados de la República Mexicana.
La Secretaría de Educación Pública (SEP), a través de la Subsecretaría de Educación Superior (SES) y la Dirección General de Educación Superior para el Magisterio (DGESuM), en coordinación con la Oficina de México de la Organización de Estados Iberoamericanos (OEI), y las Autoridades Estatales de Formación Docente, promovieron este evento desde inicios del 2022 y la estancia se llevó a cabo durante 90 días entre Octubre y la primera quincena de Diciembre.
Experiencia enriquecedora, dicen alumnos
La alumna Dulce Solís Rivera calificó esta experiencia como única y significativa, pues además de conocer un nuevo país, su cultura, personas, universidad y métodos de enseñanza, le ayudó a crecer personalmente. Indicó que las clases fueron 100% en inglés británico, lo que al inicio fue complicado por la diferencia del acento, pero con la ayuda de sus compañeros y profesores del país centroamericano logró adaptarse.
También comentó que le tocó enfrentarse a un nivel de prácticas distinto, pues la UNAE es una universidad y hay una diferencia con respecto a una escuela Normal, pero aun cuando fue un gran reto aprendió nuevas estrategias y logró salir adelante.
Por su parte, Marco Cibrián, comentó que la Movilidad lo hizo crecer en todos los ámbitos de su vida: «Me hizo salir de mi zona de confort y ponerme en una situación en la que yo mismo fui expuesto a ver mis carencias y forzado a trabajar en ellas», expresó.
Indicó, que la Movilidad Académica lo llevó a mucho aprendizaje en el ámbito educativo, pedagogía, de técnicas y herramientas educativas, etcétera, “pero lo que se lleva el primer lugar es el crecimiento humano que me brindó y a fin de cuentas todo es benéfico, pues si crece la persona, crece el profesional”, enfatizó.
Finalmente, Sussy Lizeth Gómez Curiel, compartió que para ella la Movilidad fue un reto que le significó “un miedo constante, una intriga diaria, y una preocupación de no saber cómo resultaría”, lo que al final se convirtió en una de las mejores experiencias de su vida, “con un crecimiento en todos los sentidos, en donde el conocimiento adquirido, tanto académico, cultural como personal, me llevaron a convencerme aún más de la profesión que escogí”, puntualizó.
La directora de la Escuela Normal Fronteriza Tijuana, doctora Catalina Guadalupe Ortiz Macías, por último afirmó que la Movilidad Académica Iberoamericana, en la que los alumnos de la institución seguirán participando año con año, sin duda alguna es una experiencia que fortalece el perfil de egreso de los futuros docentes.